Para obtener obras únicas se usa la técnica antigua del planchado o conformado, trabajando sobre moldes de madera después de haber sometido el fieltro o la paja al vapor. Se crean adornos con plumas, organzas, tules, seda, flores. El alambrado de las piezas, la sujeción de los adornos y el remate final es siempre a mano para así poder conseguir un producto que alcanza la categoría de arte textil.